El cabildo a fines del S XIX
El 17 de abril Francisco de Argañaráz y Murguía fundó el archivo de la futura ciudad y la apertura del libro del Cabildo.
FRANCISCO DE ARGAÑARÁZ Y MURGUÍA junto con otros españoles llegaron a la zona elegida para erigir la nueva ciudad el viernes 16 de abril de 1593. El día 17 de abril se eligió a Rodrigo Pereyra como escribano público. Argañaráz funda el archivo de la futura ciudad y la apertura del libro del Cabildo.
El día 19 de abril de 1593 Francisco de Argañaraz y Murgía fundó la ciudad de San Salvador de Velazco en el Valle de Jujuy. En el atardecer de la fundación Argañaraz nombró a los integrantes del Cabildo: Pedro de Godoy y Lorenzo de Herrera asumieron el cargo de Alcaldes Ordinarios; Juan de Seguro, Miguel García Valverde, Francisco Falcón y Marco Antonio asumieron como Regidores; Francisco de Benavente asumió como procurador general; Julián Núñez Galván asumió el cargo de Mayordomo. A Juan de Seguro se le concedió por única vez dos cargos como Alguacil y Regidor durante los primeros 6 años del nacimiento de la ciudad. En los primeros tiempos de la fundación los vecinos eran conquistadores, descubridores, pacificadores y pobladores; y de estos se elegía al cabildante.
Al distribuir los solares y cuadras en presencia del primer cabildo, Argañaráz "proveyó que el dicho cabildo la edificase lo más presto que pudiese, y que en el entre tanto que se edificaba, se pusiese un ramadón donde se pudiese celebrar el culto divino y enterrar a los difuntos.
Para ser cabildante, primero se debía ser vecino y debían poseer su residencia en los territorios del Cabildo, poseer un capital, saber leer y escribir, y no poseer deuda a la corona y a particulares.
En 1766 por Real Ordenanza de Intendentes se modificó las estructuras de los territorios del Río de la Plata, había nacido la figura del Intendente y de la Intendencia; la política de disminuir el poder de las ciudades que era representado por la figura del cabildo, inició con los intendentes que su objetivo era aumentar el control y la autoridad real: el Intendente era los ojos del rey.
En los albores de la Revolución el Cabildo de Jujuy convocó un Cabildo Abierto y eligió al canónigo Juan Ignacio Gorriti como diputado a la Junta Grande.
El 25 de mayo de 1812 en el Cabildo de Jujuy, el Gral.Manuel Belgrano mostró al pueblo jujeño y al ejército la Bandera Nacional, recién creada.
El 25 de Mayo de 1813, el Cabildo recibe del Gral Belgrano la Bandera Nacional de Nuestra Libertad Civil.
Con el tiempo las provincias unidas del Río de la Plata intentaron organizar un estado centralizado y en 1821 el Cabildo inició su declive cuando Bernardino Rivadavia abolió el cabildo de Buenos Aires.
El 18 de noviembre de 1834, en el Cabildo de la ciudad se realizó el Acta de la Autonomía Política con respecto a la provincia de Salta.
El 18 de diciembre de 1837, el gobernador Pablo Alemán, decretó la supresión de la Corporación denominada Cabildo y Regimiento de la ciudad de San Salvador de Jujuy.
El decreto entró en vigor el primero de enero de 1838, las medidas tomadas por Rivadavia en 1821 llegaron a Jujuy 17 años después. El Cabildo el centro de poder de las ciudades en la época colonial había quedado definitivamente abolido del Río de la Plata; ya que Jujuy fue el último en abolirlo. El Cabildo fue reemplazado por las Intendencias Municipales y Comisiones Municipales, quedando el Cabildo convertido en cárcel, regimiento de guardia urbana y casa de gobierno provisoria.
El Cabildo fue la institución política de las ciudades españolas y portuguesas en la edad media y moderna; y que se extendió hasta el primer cuarto del siglo XIX. Esta institución se pasó a América en la época colonial, y la vida política y pública giraba en torno a ella. Pero entrado en el siglo XIX perdió poder y progresivamente fue suprimida y remplazada por los municipios. Jujuy fue la última provincia en suprimir su cabildo en el Río de la Plata.
En la época de la Presidencia de Nicolás Avellaneda sucedieron algunas convulsiones en el interior del país. En el día de navidad de 1877 los opositores del gobierno de Cástulo Aparicio (gobernador de Jujuy) con el apoyo del comandante Napoleón Uriburu, junto con soldados del Regimiento 12 de Caballería atacaron el Cabildo, pero fueron rechazados, por el pueblo y los hombres leales al gobierno provincial.