11 de agosto de 2012

Francisco de Argañaraz y Murguia, el Fundador de S.S. de Jujuy


Origen de la familia Argañarás


El Capitán Francisco de Argañarás desde Amezketa, en Gipuzkoa, a Córdoba de la Nueva Andalucía. Su residencia en Santiago del Estero, la fundación de San Salvador del Velasco en el Valle de Jujuy, y la extensión de la familia al Tucumán


Introducción

El fundador de Jujuy, del cual desciende la familia "Argañarás" de Córdoba, Argentina, se llamaba don Francisco de Argañarás y Murguía, nacido en Amezketa, pintoresca villa perteneciente al partido judicial se Tolosa, cerca de la frontera de Navarra, en la provincia deGipuzKoa -en el país vasco .

Consta en su información de méritos y servicios, presentada ante la real audiencia de La Plata el 24 de diciembre de 1596, que era hijo legítimo del Capitán Martín Ochoa de Argañarás y de doña Leonor de Murguía, hija a su vez de don Amadís de Murguía, Señor de la Casa y Palacio de Murguía, en Astirraga y de Doña María Ortiz de Sandoval. Su padre fue conquistador de La Florida e intervino en Santo Domingo, Cuba y en Jamaica. En ausencia de Martín Ochoa de Argañarás los hijos habían quedado en la vieja casa de Amezketa, solos con su madre, doña Leonor Murguía y Ortiz de Sandoval.

La matrona vasca hizo renuncia voluntaria de todo lo que no fuera la instrucción de sus hijos. Debía protegerlos de la orfandad circunstanciada por la ausencia del progenitor, a quien no vería nunca puesto que murió guerreando en las tierras del Nuevo Mundo. Y este hecho, unido a la pérdida de los bienes patrimoniales, originó que los jóvenes tuvieran que enrolarse en los ejércitos del rey.


El mayor de ellos, Martín, murió en poco tiempo guerreando en Flandes Y el otro, Francisco, tuvo una vida llena de sacrificios, compensados finalmente por la gloria de haber fundado San Salvador de Jujuy. Francisco nació en 1566 y heredero de ilustre prosapia a la muerte de su hermano mayor pasó a ser Señor de la Casa de Argañarás y legítimo sucesor de la de Murguía.

En América

A los 19 años Francisco cruzó el Atlántico llegando al Caribe, siendo el único representante genealógico de los Argañarás guipuzcoanos, con ciertos valores esenciales, aunque de cotización problemática. Como un nombre ilustre y una esperanza nutrida de sueños y de aspiraciones. América se le ofrecía con sus bosques impenetrables, sus páramos inmensos, sus montañas coronadas de nubes.

Y así lo vemos un día en Panamá. Y otro en Cartagena de Indias. y en las costas del Ecuador, sirviendo en distintas expediciones. Hasta que al fin logra su aspiración de llegar a la Ciudad de los Reyes: Lima. Centro vital del virreinato que abarca de norte a sur todo el sojuzgado imperio de los Incas. Allí pasa algunos meses sin mayor provecho en esa ciudad de vanidades y protocolos cortesanos, decidiendo actuar en otras latitudes.

Se dirigió hacia tierras del sur que ofrecían posibilidades inmediatas en los fértiles valles calchaquíes y las serranías de Tucumán. En el otoño de 1586 dirige una expedición que cruza el altiplano andino con las escasas fuerzas reclutadas en Potosí por el gobernador del Tucumán, don Juan Ramírez de Velasco. Baja por la Quebrada de Humahuaca y llega hasta Santiago del Estero donde se establece y fija su residencia, sirviendo lealmente al gobernador.

En Santiago del Estero contrajo matrimonio con Doña Bernardina Mexía Mirabal y Salazas, hija del Capitán Hernán Mexía Mirabal, uno de los más famosos conquistadores del Tucumán, y de su legítima esposa, Doña Isabel de Salazar.

Hay una versión equivocada, que presenta a Bernardina como hija del Capitán Hernán Mexía Mirabal de otra unión o matrimonio, con María Mejía, una india cordobesa principal, hija del cacique de Mancho, pero con esta tuvo dos hijas, llamadas Leonor Mejía y Ana Mejía.

Fundación de Jujuy

Un día se le ofrece la oportunidad ambicionada. Ramírez de Velasco lo designa para fundar una ciudad en el estratégico valle de Jujuy. Francisco de Argañarás tenía 33 años, trece de ellos pasados en tierras americanas, siete de los cuales de actividad en el Tucumán.

Esta era una empresa difícil y no cualquiera podía realizarla, puesto que en el valle de Jujuy hubo anteriormente dos fundaciones de la ciudad que fueron destruidas por los indios: Ciudad de Nieva en 1561 y San Francisco de Alava en 1575, arrasadas casi de inmediato por los nativos pusieron de manifiesto las dificultades de la tarea. Ninguna de ambas prosperó porque la resistencia aborigen no lo permitió.

El tercer intento tenía que perdurar, puesto que el largo camino al Perú exigía nuevas fundaciones para consolidar la ocupación de las tierras por el paso estratégico y obligado de la Quebrada de Humahuaca. El extremo sur del valle de Jujuy resultaba ideal a los españoles para enclavar una ciudad que sirviera de apoyo a la comunicación entre el Tucumán -el territorio que hoy ocupan las provincias de Santiago del Estero, Córdoba, Tucumán, Catamarca, La Rioja, Salta y Jujuy- y el Perú.

Apelando a su prestigio de hombre valiente y al respeto y confianza de sus numerosos amigos, logró preparar una partida con el dinero de la dote de su esposa, tal como él mismo lo afirma en su información.

En Enero de 1593 parte de Santiago del Estero, pasando por Salta donde hizo las providencias del traslado. Con numerosos indios yanaconas abriendo la marcha, dieciocho carretas cargadas, soldados de guardia con arcabuces para vigilar la carga; tropas de caballos, caprinos y ovejas. Las mujeres en carretas enormes y bamboleantes por aquellos caminos todavía sin historia, rumbo a Jujuy. Y, por último, la milicia de los hidalgos con sus armaduras y armas de guerra, los ballesteros y un falconete.

El 19 de Abril de 1593, domingo de Resurrección, después de elegido el lugar para la fundación, procede al ceremonial acostumbrado, las palabras del Evangelio y las cosas de la Santa Fe católica. En presencia de soldados y pobladores mandó hacer un hoyo en el centro del solar señalado para plaza pública, en donde colocó un palo, por picota y símbolo de la justicia real.En toda fundación se colocaba en la plaza el rollo o picota como signo de jurisdicción o autoridad real. Era una piedra o columna de madera, símbolo de la justicia, ante la cual se aplicaban las máximas sanciones penales. La picota testimoniaba el poder conferido al jefe de la expedición para dictar y hacer cumplir las leyes de servicio público.


La ceremonia tenía que ser solemne: el fundador toma posesión del terreno en nombre del rey de España, levanta la espada y hace el reto a quienes se opongan a la posesión de la tierra y fundación de la ciudad. Francisco desnuda su espada, con la cual tira al aire tajos y reveses, arrancó hierbas, tiró piedras y en nombre del Rey tomó posesión de la tierra; después requiere en voz alta a los presentes, por si entre ellos hubiera alguno que contradijera el lugar del asiento de la nueva ciudad y su jurisdicción. No habiendo en el concurso quien alegara en contra se dio por terminado el acto de la fundación, llamándose la ciudad San Salvador del Velasco.


Soldado y hombre trabajador incansable, buen padre de familia que luchó contra el destino inseguro, contra los elementos de la naturaleza, contra los peligros propios del medio y contra todos los obstáculos. La capacidad, habilidad y valor de don Francisco de Argañarás y Murguía, lograron el milagro de levantar la ciudad en el espléndido Valle del Xibixuy

Hizo cuanto pudo para sobrevivir, por sustraer su nombre a los riesgos inevitables de la indiferencia o el olvido, que vienen a ser, en forma cierta, los más constantes colaboradores de la muerte.


Desde el año 1952, el nombre de la ciudad es San Salvador de Jujuy.



Apellido Argañarás:

Linaje vasco, de la villa de Amezqueta, en el partido judicial de Tolosa (Guipúzcoa).


Argañarás es una palabra contracta del vascuense, compuesta de tres elementos léxicos: "arri", "gañara" y "aitza". Las dos primeras indican lugar o parte topográfica y, además, el color rosado. La tercera significa peña o afloración rocosa. El sentido global de la palabra sería pues: "Lugar de la peña rosada" o "la veta o parte rosada de la peña o de la roca". Una variante española de este apellido es el de Arguinaris.


Otros autores le atribuyen origen francés, fundamentando su afirmación en el hecho de que en éste país existe el apellido D´Arguenaras o D´Arguegnaras, del cual Argañarás no sería más que un derivado.


El apellido se escribe aún en forma indiscriminada con "s" o con "z" por los miembros de las distintas ramas de esta estirpe que existen en América.


Argañarás en Córdoba del Tucumán


Francisco de Argañarás y Murguía y Doña Bernardina Mexía Mirabal y Salazartuvierom ocho hijos en Santiago del Estero La familia se extendió al Tucumán, contando en Córdoba con la presencia de su hijo Pablo de Argañarás y Murguía y Mexía Mirabal, que era Maestre de Campo y vecino de Córdoba, casado con Doña Antonia de Vera y Aragón.


El nieto de Francisco y Bernardina, Felipe de Argañarás y Murguía y Vera de Aragón, nació en Córdoba en 1664. Casado con Doña Antonia de Cabrera y Mendoza, nieta segunda paterna de Don Jerónimo Luis de Cabrera, fundador de la ciudad de Córdoba de la Nueva Andalucía, y de su esposa Doña Luisa Martel de los Ríos y Mendoza. Los hijos de Felipe y Antonia fueron:


§ Francisco de Argañarás y Murguía y Cabrera Mendoza.

§ Pablo de Argañarás y Murguía y Cabrera Mendoza, fallecido en 1732.

§ María de Argañarás y Murguía y Cabrera Mendoza, casada en el Totoral en 1678.

El árbol genealógico es difícil de unir con fechas por lo cual no se realiza todavía por completo. En el último siglo parte de la familia Argañarás de Córdoba desciende de Salvador Argañarás y Álvarez, hijo de Salvador Argañarás y Eugenia Álvarez. Nació en 1887 y se casó en 1914 con María Maldonado y Allende. Tuvieron cinco hijas:


§ María Eugenia Argañarás Maldonado, se casó con Hugo de la Rosa Igarzábal.

§ Raquel Josefina Argañarás Maldonado, se casó con Carlos Crespo Caballero

§ Beatriz Argañarás Maldonado, se casó conJuan Antonio Álvarez Ocampo.

§ Elsa Susana Argañarás Maldonado, se casó con Mauricio A. Ferrari.

§ María Elena Argañarás Maldonado, se casó con Miguel Angel Bustos Vocos.


Esta es historia reciente y sigue con una numerosa familia que se reúne en el recuerdo, el 26 de Marzo de 2005, en Villa Rivera Indarte de Córdoba - Argentina.

por Julio Crespo Argañarás


Fuentes:
  • Argañarás, Salvador R.- Genealogía de la familia Argañarás - Escritos 1965 - 1975 -Córdoba
  • Bustos Argañaráz, Carlos P.-Francisco de Argañarás y Murguía - Centro de Estudios Genealógicos de Córdoba, Argentina. 1973
  • Perez Valiente de Moctezuma - El Capitán Francisco de Argañarás- La Nación -Buenos Aires-1953
  • Carrillo Horacio- La Fundación de Jujuy -La Prensa- Buenos Aires-1941
  • Torre Revello, José -La Fundación de la Ciudad de San Salvador de Velazco - La Prensa-Buenos Aires- 1936
  • Euskal Abizenak -Archivo general de Gipuzcoa -2005
  • elanillo.com-Anillo de Genealogía Hispana-2005
  • APELLIDOS de GIPUZKOA -Compendio Historial de Guipúzcoa de LOPE MARTÍNEZ DE ISASTI (1625)
  • paisvasco.net/gipuzkoa/amezketa
  • gipuzkoa.net/amezketa
  • -Familias Argentinas y Ancestros - Anillo de Genealogía Hispana -2005
  • www.raicesyalasdecordoba.8m.com

por Julio Crespo Argañarás



Escudo familiar del Capitán Francisco de Argañarás y Murguía, fundador de Jujuy Fuente: La Nación (Argentina) 19 de Abril 1953



Firma de Don Francisco de Argañaraz